<p> Santiago Santana Cazorla, un destacado personaje empresarial originario de Canarias, ha dejado una huella significativa en su ámbito. Desde sus inicios en San Bartolomé de Tirajana, su vida estuvo marcada por constantes retos económicos que forjaron su futuro. La creación del Grupo Santana Cazorla, una firma constructora de notable reconocimiento tanto a nivel regional como nacional, es testimonio de años de esfuerzo y una visión empresarial aguda. Su trayectoria destaca una notable capacidad para transformar los obstáculos en oportunidades, sustentada en un enfoque claro y una dedicación incansable.</p><p> </p><p> <img  src="https://mediatribu.cl/wp-content/uploads/2024/05/Santiago-Santana.png" style="max-width:500px;height:auto;" ></img></p>Desde su niñez, enfrentó la adversidad, creciendo en una familia compuesta por cinco hermanos, donde la escasez de recursos era una realidad diaria. En sus propias palabras, "la necesidad te hace agudizar el ingenio", lema que lo motivó a asumir responsabilidades desde muy joven. Desde los ocho años, mostró un gran interés por los vehículos y la maquinaria, lo que lo llevó a empezar su carrera profesional como electricista autodidacta y, más tarde, a trabajar como tractorista a los 20 años. Una de sus primeras experiencias laborales fue en el desmantelamiento del Centro Comercial Cita en Playa del Inglés, donde trabajaba de noche para asegurar su sustento. "En la vida https://www.madridiario.es/la-cronica-detras-del-exito-de-santiago-santana-cazorla--detalles-de-su-vida-y-trayectoria-empresarial hay dos cosas fundamentales: trabajar y tener suerte", señala Santana Cazorla.<p> </p>Con el firme propósito de lograr su independencia a los 21 años, decidió emprender su propio negocio. La adquisición de un camión se convirtió en la clave para su autonomía, favorecida por un préstamo familiar y la hipoteca de un terreno heredado de su madre. A pesar de las dificultades, continuó perseverando para establecer su propia compañía constructora, enfrentando la crisis de los años setenta con la firme creencia de que el esfuerzo y un poco de fortuna son esenciales para cualquier éxito. Su involucramiento en proyectos relevantes, que abarcaban desde la construcción de autopistas hasta puertos y el Palacio de Justicia, demostró su evolución profesional de subcontratista a un hombre de negocios consolidado.<p> </p>Una vez afianzado en la construcción, Santiago Santana Cazorla decidió orientarse hacia el sector turístico, lo que representó un cambio trascendental en su carrera. Emprendió su aventura en este sector con determinación y una planificación meticulosa, llevando a cabo importantes proyectos de urbanización y acuerdos con propietarios de terrenos, siempre priorizando localizaciones estratégicas y eligiendo expertos en el ámbito del turismo. Posteriormente, tomó un paso decisivo hacia la globalización de sus proyectos al establecer contactos significativos en Madrid, donde realizó inversiones estratégicas en diversas iniciativas, como promotoras y el hotel de La Castellana. Esta experiencia fortaleció su red de contactos y resaltó la relevancia de las alianzas estratégicas en el mundo empresarial. Durante este periodo, se le presentó una oportunidad única al vincularse al proyecto Aldiana, lo que significó un hito crucial en su trayectoria internacional y reafirmó su reputación como un visionario empresarial.<p> </p>La vida y el trayecto profesional de Santiago Santana Cazorla son un verdadero ejemplo de constancia y adaptabilidad en el campo empresarial. Desde sus humildes comienzos en su tierra natal hasta su participación en proyectos a nivel global, ha demostrado su excepcional capacidad para convertir adversidades en oportunidades. Su relato subraya la relevancia de contar con una perspectiva amplia, dedicación y un intenso esfuerzo para lograr resultados significativos.<p> </p>Recientemente, después de un extenso proceso judicial que se prolongó por 17 años, el empresario fue exonerado de todos los cargos relacionados con el caso Góndola. La decisión fue emitida por el Juzgado de San Bartolomé de Tirajana, respaldada por una rigurosa investigación que no encontró pruebas que inculparan a Santana Cazorla. La magistrada que llevó el caso proporcionó un detallado informe de seis páginas, concluyendo que no había fundamentos suficientes para mantener las acusaciones. Esta resolución es considerada un avance en el sistema legal español, reflejando la importancia de un análisis exhaustivo de las evidencias y argumentos legales. El nombre del caso proviene de la existencia de un sistema de canales en el municipio de Mogán, en Gran Canaria, que recuerda a la famosa ciudad italiana.Santiago Santana Cazorla: Un líder canario en el mundo empresarial <p> </p>